CRN. – Está claro que después de comer lo que menos apetece es hacer algún tipo de actividad física. Y seguramente mucha gente piensa en echarse una siesta o tumbarse en el sofá a ver la televisión, mientras reposa la comida. Pero lo cierto es que caminar o dar un paseo después de comer tiene muchas ventajas.
Al hacer ejercicio aumentamos el flujo sanguíneo del cerebro, y esto hace que nuestro cuerpo libere endorfinas (conocidas popularmente como las hormonas de la felicidad) y serotonina (un neurotransmisor relacionado con el control del estado de ánimo y las emociones).
Pero además de este tipo de ventajas, caminar después de comer tiene otros cinco beneficios principales para la salud, ya sea tras desayunar, comer o cenar.
1. Mejora tu digestión
Existen muchos síntomas que indican que tienes una mala digestión, como puede ser la hinchazón, estreñimiento o simplemente malestar estomacal. Un método para combatirlos o aliviarlos puede ser caminar, ya que así estimulamos el estómago y los intestinos. Esto ayudará a que la comida se digiera mejor.
2. Reduce el riesgo de cardiopatías
Está demostrado que realizar ejercicio constante mejora la salud del corazón, ya que reduce la tensión arterial, el colesterol, el riesgo de infartos, ictus y otros problemas cardiacos. Además, según un estudio, podría ser más beneficioso un paseo de 15 minutos antes que un entrenamiento más intenso.
3. Regula el nivel de glucosa en sangre
Tener mucho azúcar en sangre puede provocar una saturación en el hígado y en los músculos. Por ello, la insulina que segregamos ayuda a trasladar ese azúcar a las células y se producirá energía. Hay estudios que demuestran que una manera de evitar altos niveles de azúcar en sangre es caminar después de las comidas.
4. Ayuda a controlar el peso
Del mismo modo que mejora la salud del corazón, hacer ejercicio de forma regular también ayuda a mantener o perder peso. Dependiendo del objetivo que tengamos tendremos que quemar las mismas calorías que las que ingerimos o más. Cuando caminamos, el cuerpo gasta más energía, por lo que se queman más calorías. Además, también ayuda a regular el apetito. Es aconsejable que se camine rápido, a unos 5 ó 10 kilómetros por hora.
5. Ayuda a dormir mejor
Si después de cenar damos un pequeño paseo nos ayudará a conciliar mejor el sueño. Esto contribuirá en nuestro descanso, ya que podremos hacerlo profundamente sin tener ningún tipo de interrupción durante la noche. Esto sucede gracias al alivio de las molestias estomacales que pueden surgir después de cenar.
Cuándo dar el paseo y durante cuánto tiempo
El momento que escojas para caminar es indiferente. Se puede salir a andar inmediatamente después de terminar de comer o esperar unos minutos para hacerlo. Eso dependerá de cómo le siente a cada uno.
En cuanto al tiempo que debemos estar caminando también dependerá de la persona y de los objetivos que quiera conseguir. Para digerir mejor la comida basta con 10 minutos, pero si quieres mejorar tu forma física se recomienda cumplir los 10.000 pasos diarios.
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